6 de enero de 2013

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Espero, fervientemente, espero que encuentres a esa otra mitad.
Una persona que te haga soltar todos los tacos que nunca dijiste joder, esa con la que puedas salir de un sitio sin recibo, esa que te haga soltar un puñetazo inoportuno, en el momento menos adecuado y con una persona alejada de ser oportuna, alguien que te haga hervir la sangre.
Que simplemente un día tire su café encima de tus esquemas, que te desabroche un botón, que te haga olvidar las puntualidades y que sea tu día eterno, tu sol. Ella sería tu hermana, tu hija, tu madre, tu vecina cachonda, la chapona de tu clase, tu esposa, tu jefa, la cartera, la verías con otros ojos, sería perfecta para todo.

QUE TE HAGA VIVIR UN SUEÑO